Barcelona por Collserola

La ruta se inicia en Torre Baró, límite este de Barcelona. Podemos llegar hasta aquí con la Renfe y con la linia 11 desde Trinitat Nova estación de enlace con la linea 4.
or la proximidad a Barcelona, uno de los alicientes de esta ruta es perderse por los múltiples caminos de Collserola y así descubrir nuevos sitios, con la ventaja de poder regresar a casa sin muchas dificultades. Si lo que queremos es tomar la vía más rápida debemos seguir la premisa de avanzar hacia el oeste y en la medida de lo posible teniendo la ciudad siempre a la vista.
Esquemáticamente esta es la ruta que nosotros tomamos:
El primer objetivo es la Torre Baró a la que podremos acceder subiendo por la calle de Castelldefels que dejaremos en una curva cerrada a la izquierda en favor de una pista de tierra. Caminando si perder altura y por la cresta pronto le suceden el Turó de les Roquetes (304m) y el Turó d'en Segarra (328m) con estupendas vistas a Barcelona. Seguimos con un descenso pronunciado hasta la carretera del cementerio de Collserola y cogemos una pista ancha, dejando la cresta más arriba y pasando cerca de Can Ferrer y el Turó d'en Gras. A partir de aquí y a la altura del Turó d'en Fotja podemos seguir los indicadores de GR-92 y ocasionalmente la Ruta Verdaguer, hasta llegar a la font de la Salamandra, un poco antes de rodear el Tibidabo.

Torre Baró desde el Camino

Durante el camino pasaremos, primero junto a casas de aspecto señorial y sin habitar en medio del bosque y después por una gran maraña de pequeñas urbanizaciones que se extienden por las laderas de la montaña. Ahora nuestro punto de referencia será la Font de la Budellera, de visita opcional y muy recomendable por su contraste con la omnipresente y moderna Torre Foster, y Vallvidrera que cruzaremos de punta a punta por la calle Mont d'Orsà. Nos encontramos ya al final de la ruta, avanzamos por el collado de la Espinagosa a través de una ancha pista que nos llevará al Collado de Portell hasta el repetidor de Sant Pere Màrtir (384m).
Una pequeña placa junto a unos restos de obra nos recuerda la ubicación de la antigua ermita de Sant Pere. Sólo nos queda descender por un estrecho y pronunciado camino hasta el mirador dels Xiprers, a la altura de la Carretera de les Aigües, momento de escoger el camino de regreso a casa y mirar hacia el este, al lejano punto de partida.